domingo, 29 de enero de 2012

spark-s






No estoy segura de poder escribir mi alma en este fragmento. Es complicado. Porque sobretodo, muchas veces duele sacar lo mas profundo.
Es probable que si vuelves a poner en el mismo monte a dos cebras que una vez se vieron, hace muchos años, no se reconozcan, y si lo hacen nosotros jamás lo sabríamos. Lo que si sabemos esque los seres humanos tenemos la capacidad de recordar un cúmulo de cosas importantes para nosotros en su día, o ahora. Esas cosas importantes hacen que nos estremezcamos cada vez que recordamos a ese familiar ya fallecido o a ese amigo al que hace tiempo no vemos.
Esos recuerdos, que alguna vez fueron momentos extraordinarios.
A mi me pasa igual. No hago otra cosa que amar. ¿Sabes? cuando duermes y respiras y ese aire cálido de tus pulmunes va a parar a mi piel, hace que me estremezca. Hace que no quiera estar en otro sitio. Tan caliente, tan cómoda, tan en la gloria.
Jamás nadie en el mundo me había abierto el corazón de esa manera. Tanto que si estiendo mi mano podría introducirla y rozarlo. Llenarla de sangre. Tu sangre. Y comprobar lo rápidos que son esos latidos. Me dejas ver lo mejor que tienes. Jamás te faltaré. Ni aunque pasen tresciento cincuenta y siete años y no te vea. Estaré en algún lugar. Sintiendo tus latidos. Ayudándote. Formas parte de mi historia y jamás nadie lo podrá cambiar.
Continuar la historia es lo que mas me importa ahora.
¿vamos?

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